De esta manera, el senador del Movimiento Popular Neuquino (MPN), justificó su voto negativo contra el acuerdo entre los gobiernos de Argentina y China para la instalación de una Estación Espacial para la Investigación del Espacio Lejano, en la Provincia del Neuquén.

19 Dic 2014
    

El senador del MPN por la provincia del Neuquén, Guillermo Pereyra, no acompañó el proyecto que avala el acuerdo entre los gobiernos de Argentina y la República Popular China para la instalación de una Estación Espacial que sienta un peligroso antecedente para las empresas de otros países que vengar a radicarse a las provincias. “Los trabajadores que vienen de China se rigen por las leyes de China, entonces, estamos dando un carácter de embajada a un lugar donde vienen a instalar una antena”, sostuvo.

 

Pereyra rechazó las concesiones otorgadas para la instalación de la antena para la investigación del espacio lejano, que se construye en un terreno de 200 hectáreas cedidas en comodato por la Provincia del Neuquén a la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE), en cercanías de Bajada de Agrio; y cuestionó que, “inclusive en otras empresas chinas como la minera instalada en Sierra Grande, sus trabajadores ya se rigen por las leyes de su país de origen”.

 

El senador nacional y además titular del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa dijo temer que esto pueda ser utilizado como antecedente en las próximas negociaciones de las empresas que están viniendo a radicarse en las provincias productoras de petróleo y gas, que traen técnicos y personal especializado, “me sorprende que tratemos una concesión en este sentido y creo que no puede ser posible”.

 

Por otra parte, el titular del bloque de senadores nacionales del Movimiento Popular Neuquino también rechazó la exención impositiva por 50 años, que se impone sobre la construcción y posterior utilización de la antena. En este sentido, el legislador neuquino recordó que en nuestro país “todos pagamos impuestos” y que “los trabajadores estamos peleando para que por lo menos nos eleven el mínimo no imponible a parte del salario gravado, y no podemos conseguirlo”.

 

“Las provincias coparticipamos de esos impuestos, esto también causa un grave daño a las economías regionales, más allá del precedente”, concluyó.