Como se sabe la dirección de bromatología municipal es el organismo de controlar, entre otras cosas, que todo el alimento que ingresa a San Martín de los Andes sea inspeccionado y certificar que sea apto para su consumo, además realizan las inspecciones bromatológicas a todo comercio gastronómico incluyendo los boliches nocturnos, como también kioscos, despensas y demás, en lo referido al expendio de alcohol a menores, por nombrar sólo algunas tareas.
A partir de la aprobación y promulgación de dos nuevas normas que entraron en vigencia en la localidad la dirección de Bromatología municipal suma tareas, a las importantes responsabilidades que asume. Es el caso las ordenanzas de la prohibición del ingreso de viandas a la localidad en transportes turísticos y el control del uso de cascos en el cerro Chapelco a menores de edad.
Si bien el departamento mencionado ha aumentado el plantel, “a 5 personas” estables en calle, Rogelio Martinez, jefe del área, cuenta “ampliamos el horario, los hago rotar para que haya personal de bromatología en la tarde, pero tampoco es un número tan grande para dedicarla exclusivamente a estos controles por la cantidad de tareas que tenemos que implementar.”
Respecto de la tarea de control del uso de cascos a menores de edad en Chapelco, Martinez indica “por lo pronto vamos a implementar el sistema de cartelería que tiene que tener cerro, en cuanto al control y fiscalización dentro del cerro, todavía estamos evaluando como vamos a hacer para cubrir todo el centro de esquí (…), vamos a tener que ver como implementamos los controles dentro de las pistas, cómo vamos a tener acceso y cuánta gente voy a tener que destinar al cerro para que se cumplan estos controles…”
En tanto el director de bromatología dijo que no fue consultado por el Concejo Deliberante a la hora de sancionar la ordenanza de los cascos; en rigor de verdad se cree que, como el director de bromatología al momento de la sanción de la norma era concejal, Juan Chistik, fuera él habría sido quien supervisó y acordó con sus pares la manera en que el organismo de control generaría las inspecciones; por otro lado expresó haber sido consultado por la ordenanza de las viandas.
Lo cierto es que, aún el personal de bromatología le ponga la mejor buena voluntad al trabajo y coordine con otras fuerzas tareas en terreno, una vez más y desde muchos hace años, se repite la misma metodología de cargar más tareas sobre algunos sectores municipales que se ven superados por falta de personal, de equipamiento y de recursos.